Este término alude a un tipo de comportamiento humano caracterizado por un respecto de la naturaleza dentro de su biodiversidad. Que se empeña en proteger el medio ambiente valorizando en su cotidiano las acciones y proyectos de desarrollo sostenible. Que se compromete a ser un actor para el cambio.
Esta definición proviene del proyecto Homo Ecologicus y viene al caso ya que hemos visto mencionado este concepto en el libro de Ramón Tamames, El grito de la Tierra, que se publica este 14 de octubre.
Transcribimos unos extractos que hemos leído en el periódico El Mundo:
Amor por la Tierra. “Vivimos en la biosfera, y participamos en el funcionamiento global de la naturaleza, en la que nada es obvio, pues todo es resultado de gran numero de interacciones. Y el hecho de estar aquí, en el único planeta azul conocido en el universo, es un privilegio a valorar por la humanidad, por el hecho de disfrutar de un hábitat, en un principio hospitalario para todas las especies”. […] El crecimiento demográfico y las capacidades tecnológicas disponibles, por el maquinismo primero y la revolución científica y tecnológica después, han hecho que la larga progenie de la mujer y el hombre se haya convertido en el mayor peligro para todos los equilibrios ecológicos del planeta. Pero también fuimos tomando conciencia de la necesidad de conservar la Tierra de promisión que habitamos, e impedir ser expulsados del único paraíso conocido, que hemos de reconquistar”.
III Guerra Mundial. “La lucha contra el calentamiento global y el cambio climático implica un esfuerzo mucho menor del que se realizó a lo largo de toda la Segunda Guerra Mundial, con sus seis años de fuego y acero, genocidios y hecatombe nuclear. Una analogía que impulsa la idea de que para enfrentarnos mejor al enemigo que es la Tercera Guerra Mundial, que estamos viviendo contra la biosfera, hemos de conocer como es el adversario, y saber como frenarlo”. […]
Huella Humana. “El mundo en que vivimos está casi completamente humanizado. No hay grandes espacios todavía libres de la influencia humana […] En contraste, algo más de dos siglo atrás, Adam Smith, era optimista cuando publicó La riqueza de las naciones. Entonces el planeta aún era casi virgen con sólo algunos enclaves importantes de implantación humana, con un total de 800 millones de personas. Hoy todo se ha transformado. En apenas 7 generaciones, la población se ha multiplicado por 8,5. Por lo cual, junto con el progreso de la tecnología, ha cambiado la faz del planeta azul.
Amenazas. “Son siete los problemas capitales a los que hoy nos enfrentamos en la materia macroecológica […] Los océanos: dos tercios de la superficie del globo están amenazados por la contaminación e intensamente mermados por la sobrepesca […] El deterioro de las disponibilidades de agua dulce, tanto por cantidad como por la calidad […] Los conflictos de aguas ya existen e irán in creciendo […] La degradación de los suelos por cultivos intensivos […] La deforestación, sobre todo con la destrucción de los bosques húmedos tropicales […] El consumo creciente de energía, todavía con el 85% a base de combustibles fósiles […] La pérdida de biodiversidad, debida a la ocupación sistemática por el hombre de los tradicionales hábitats de los demás animales, con la extinción de toda suerte de especies”.
Superpoblación. “Con todo, el más importante motor del deterioro […] es el crecimiento de la población. Y su freno futuro resulta más incierto de lo que en ocasiones se presume. A la hora de interpretar la Primera Ley de Malthus (el crecimiento de la población supera el de la capacidad de producir alimentos) ya no es posible ceñirse estrictamente a la cuestión de los alimentos, la más perentoria de las subsistencias […]. A largo plazo, tan preocupantes como las subsistencias son las situaciones que van creándose por la implacable agresión de los humanos a la biosfera […] habiéndose desbordado la capacidad de autoregeneración y de autorecuperación de la propia naturaleza. Esta situación se corresponde con nuestra proposición de una Segunda Ley de Malthus. En otras palabras, si bien los 6.800 millones de habitantes de la Tierra (2010) tiene hoy, en su inmensa mayoría, suficiente para comer – aunque sea con dualismos de todas clases y hambre y desnutrición para 1.100 millones de personas- , lo cierto es que ese gigantes stock demográfico, que llegará a 9.000 millones a mediados del siglo XXI, podría incidir de forma irreversible en la biosfera […] La Segunda Ley de Malthus se evidencia en términos de colmatación de la biocapacidad, causada por la presión humana, con su expansión demográfica y sus crecientes poderes tecnológicos de destrucción y contaminantes. Frente a la situación tradicional hasta de la Revolución Industrial de una demografía de lenta expansión y escasamente inductora de cambios ambientales, la humanosfera de hoy se ha hecho demasiado densa e impactante […]”.
Tendrá que aparecer el homo ecologicus
Soluciones. “Se trata, pues, de que entremos en razón y nos percatemos de que el crecimiento no puede ser indefinido. Que asumamos las lecciones que la biosfera va dándonos en su continua degradación. De modo que si frente a la Primera Ley de Malthus surgió el homo tecnologicus neutralizándola, si se quiere compensar la segunda, tendrá que aparecer el homo ecologicus, el único capaz de frenar, en libertad, el reloj demográfico desactivando la bomba de la población, para abordar al mismo tiempo un gran cúmulo de tareas de mitigación del deterioro, recortándolo y de adaptación introduciendo toda clase de nuevos instrumentos como las energías alternativas.
En próximas entradas de ecointeligencia profundizaremos tanto en este concepto de Homo Ecologicus como en este nuevo libro de Tamames.
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MANGA ANCHA Ramón Tamames
‘La humanidad está en guerra contra el medio ambiente’
Conocido por su trayectoria política y económica, Ramón Tamames nos abre los ojos al que quizás sea el mayor reto para la humanidad en epocas venideras: la crisis ecológica.
http://www.elmundo.es/especiales/manga_ancha/
«Guerra Civil de La Humanidad».
Hominen, persona. Concepto que se refiere a la mujer o al hombre, que incluye a ambos géneros. Homo, hombre parece referirse solo al género masculino.
«Hominem Ecologicus» versus «Hominen Predator»
Ecointeligencia como resultado de las sinergias de los Hominen Ecologicus.
Depredación como resultado de las sinergias de los Hominen Predator.
Ecointelingencia versus Depredación.
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